Bajo el penoco

Reclamo brasileño

| 2024-07-17 00:08:00

Horas antes de la llegada del presidente brasileño Lula da Silva a Bolivia, la semana pasada, el embajador de Brasil en Bolivia Luis Henrique Sobreira Lopes, hizo un reclamo vehemente al gobierno boliviano, que seguramente hubiera resultado altisonante en un encuentro protocolar. Pero si lo dice el representante de un estado es porque se trata de un asunto crucial. Hablamos de la queja por los 13 radares que compró el gobierno del MAS en 2016 por 277 millones de dólares y que hasta la fecha no están funcionando, pese a que en reiteradas ocasiones las autoridades han dicho que ya están operables. El embajador ha desmentido esa versión y lo hace porque según afirma, continúa la invasión de cocaína boliviana a bordo de aviones que cruzan la frontera sin ninguna dificultad. Sobreira ha pedido mayor cooperación de Bolivia en la lucha contra el narcotráfico, que en el país vecino causa verdaderos estragos económicos y sociales. Recientemente, la policía brasileña intervino diez favelas en Río de Janeiro, donde operan bandas de narcotraficantes que importan droga y armas de Bolivia.